La adolescencia no es una etapa de transición, como algunas veces se piensa, sino que es una etapa específica y muy importante del desarrollo.
La adolescencia no es una etapa de transición, como algunas veces se piensa, sino que es una etapa específica y muy importante del desarrollo.
Cuando estamos bajos de ánimo empezamos a pensar, o nos sugieren, si no tendremos depresión. El término depresión se usa coloquialmente de forma rápida y generalizada. Está sobrevalorado el estado de felicidad perpetua, la sociedad nos exige una aparienci
Existe un cuento corto que, a mi entender, refleja muy bien la labor del psicoterapeuta
Para que un niño madure de forma sana son primordiales dos elementos: afecto e interacciones personales. El aislamiento social en los primeros años es lo más dañino y nos hace más vulnerables a sufrir problemas emocionales.
Con frecuencia confundimos la autoestima con pensar que somos lo que no somos, que somos buenos en todo, y esto realmente es un engaño
Estamos habituados, porque socialmente así se entiende así se entiende, a pensar en el desequilibrio como indicador de una patología, de que algo anda mal y, por tanto, es mejor evitar.
Todas las adicciones, le contó, no eran más que formas de tratar un mismo problema. Las drogas, el exceso de comida, el alcohol o el sexo, todo era una simple forma de encontrar la paz.
Hoy en día, la separación de una pareja y la formación de otra nueva están a la orden del día.
En ocasiones me encuentro en terapia con padres y madres que tratan de satisfacer las necesidades de sus hijos, con el afán de que estos sean felices y no sufran carencias que ellos mismos han vivido. Estos niños raras veces han de afrontar un NO.
La vergüenza es un sentimiento que tiene que ver con la timidez, el retraimiento, el miedo a hacer el ridículo o ser juzgados de forma negativa.
Las emociones buscan expresarse, si hemos aprendido que hay una forma y lugar adecuados para hacerlo, lo hacemos, y si no buscamos la manera de apartarlas, de negarlas y de comportarnos como si no existieran.
Estamos viviendo una situación nueva para todos, que requiere cambios drásticos en nuestra vida. Si para todos, adultos, no es fácil, para los niños lo es mucho menos.
Tendemos a pensar en la ansiedad como algo patológico y no es así.