En ocasiones me encuentro en terapia con padres y madres que tratan de satisfacer las necesidades de sus hijos, con el afán de que estos sean felices y no sufran carencias que ellos mismos han vivido. Estos niños raras veces han de afrontar un NO.
En ocasiones me encuentro en terapia con padres y madres que tratan de satisfacer las necesidades de sus hijos, con el afán de que estos sean felices y no sufran carencias que ellos mismos han vivido. Estos niños raras veces han de afrontar un NO.
La vergüenza es un sentimiento que tiene que ver con la timidez, el retraimiento, el miedo a hacer el ridículo o ser juzgados de forma negativa.
En la anterior entrada del blog (Febrero 2019) hice una descripción de la personalidad narcisista y del tipo de relaciones que establece. Ahora hablaré de qué hacer si te encuentras en una relación como la descrita.
En ocasiones veo en terapia a personas que se encuentran en relaciones dañinas, sean estas de pareja, familiares, laborales o de amistad.
Cada vez existen menos "familias tipo" formadas por una madre, un padre y los hijos e hijas de ambos.
Vivimos cargando con una mochila que contiene varias cosas, entre ellas, los problemas no resueltos, nuestras heridas no curadas, y la forma con que mejor hemos podido lidiar con todo ello.
Todas las adicciones, le contó, no eran más que formas de tratar un mismo problema. Las drogas, el exceso de comida, el alcohol o el sexo, todo era una simple forma de encontrar la paz.
A la Terapia Gestalt se la conoce como la terapia del presente, la terapia del "aquí y ahora".
Solemos decir "estoy estresada/o" cuando tenemos muchas cosas que hacer y creemos que no nos llega el tiempo.
Estamos habituados, porque socialmente así se entiende así se entiende, a pensar en el desequilibrio como indicador de una patología, de que algo anda mal y, por tanto, es mejor evitar.